domingo, 31 de diciembre de 2017

El Año Nuevo no te liberará sin mas Presencia


Sin duda un momento muy bonito desde cierto punto de vista, nuevos planes, nuevos proyectos, retos...

Toda una serie de cosas que en principio hacen posible dejar atras los malos momentos del año para pensar en positivo y también desde la misma óptica en una posibilidad real de cambio en situaciones que muchas veces por el momento no tenemos la clave de su solución.

Todo esto esta bien desde cierto punto de vista pero si no entras de una forma definitiva en un nivel de atención presencial lo suficientemente fuerte como para permitirte estar presente en casi cualquier momento del dia y percibir el mundo sin historia, puedes estar seguro de que llegado el fin de año que viene todo sera muy parecido y no podrás librarte nunca de los sufrimientos del cotidiano vivir, y estos grandes o pequeños estarán presentes en tu vida de forma constante como ocurre en la mayoría de los casos.

Llega un momento en la practica del Mindfulness, que es necesario dejar atrás los conceptos de años nuevos y viejos y de tiempo en general para dar lugar a la experiencia continua del Ahora, que en sus fases mas profundas no es compatible con la referencias de años nuevos y viejos que en el fondo no son mas que conceptos vacíos sin una auténtica realidad que los sustente, pues en verdad cada momento es único y jamas se repite.

Esto demuestra que cualquier unidad que se use para medir «tiempo» no es mas que una vana ficción que es en realidad inexistente y que únicamente tiene validez como un modelo teórico para funcionar en sociedad.

Fuera de eso no tiene sentido usar el tiempo como referencia para marcar propósitos ni terminar con hábitos que podamos considerar nocivos o perjudiciales.

El único momento valido para actuar es el Ahora, la creencia en una la real existencia de las «unidades de tiempo» ocultan el Ahora y crean grandes dudas que contribuyen a un estado de infelicidad o insatisfacción constante.

miércoles, 6 de diciembre de 2017

Entender que es la Reencarnación

El concepto de reencarnación o reencarnarse aunque parezca mentira es algo difícil de entender por los occidentales, debido a que tienen ideas que distan mucho de las filosofías orientales que proclaman esta idea.

En primer lugar, se ha de entender que generalmente para oriente el mundo es «Maya» Maya es un término sánscrito que significa literalmente no-es, es decir para oriente el mundo «no-es».

Esto no quiere decir que no se pueda percibir, sino simplemente que no es lo Real, es decir que aunque se pueda experimentar, es no es continuo ni duradero, lo que equivale a decir que es similar a un sueño.

Por el contrario para occidente el mundo es Real, esto quiere decir no solo se pueda experimentar, sino que es la «ultima realidad» es decir que considera que el mundo visto desde el punto de vista de la diferenciación de objeto-sujeto es la realidad mas estable que existe.

Por contra generalmente en oriente y especialmente en la India, el mundo se considera una especie de espejismo transitorio del que el principal responsable de su creación es la mente, que proyecta sus tendencias innatas (vasannas) que pasan de una vida a otra de forma continua y que proyectan el mundo vigilico de un modo similar a como lo hacen los pensamientos ocultos que se manifiestan en el sueño profundo y que hacen emerger el sueño con sueños.

Desde este otro punto de vista es mucho mas fácil creer en la reencarnación que desde la óptica occidental, básicamente porque visto de este modo podemos incluso considerar que incluso entrar en sueño profundo cada noche en realidad es una «pequeña muerte» pues el sentido de pertenencia a un cuerpo o mente se pierde cada noche en este periodo del sueño, también podemos considerar que cada sueño es una pequeña reencarnación, pues cada vez que esto acontece tomamos un nuevo cuerpo y una nueva mente que se diferencia bastante de nuestra mente vigilica, y que cada despertar es un resurrección pues tanto en el sueño profundo como en el sueño con sueños nuestro cuerpo y mente vigilicos estaban ausentes.

Así entonces desde esta perspectiva es fácil entender que si durante nuestra vida no logramos aquietar la mente de una forma estable y definitiva es muy probable que nuestras tendencias latentes se vuelvan a manifestar y nos hagan encarnar en una vida posterior del mismo modo que después de un sueño puede venir otro. 

lunes, 4 de diciembre de 2017

La Atención Plena implica Ecuanimidad

Atender continuamente el Presente cognitivo implica un tipo de atención, comparable a ver una buena película o leer un buen libro.

Es precisamente este tipo de atención la que buscamos en la practica externa de Mindfulness, pues se trata de una atención sin esfuerzo.

No entender esto correctamente implica no entender correctamente el Mindfulness, es decir forzar la atención y convertirla en insostenible, o en un autentico quebradero de cabeza.

La Atención debe estar siempre acompañada de ecuanimidad, es decir de no esfuerzo. Realmente la Atención continua genera con el tiempo la Ecuanimidad, y también la Ecuanimidad continua genera Atención continua, por lo que el cultivo de una cualidad implica el de la otra finalmente.

La idea que debe de quedar clara es que lo que buscamos es simplemente mantener un estado de atención similar al que momentáneamente alcanzamos en algunos momentos del día, cuando vemos una película o leemos algún libro o revista. Nada mas que eso, y no una atención forzada constantemente propia de un «adicto a las sensaciones» que desemboca en muchas ocasiones en cansancio y dolor de cabeza.

Dicho de otro modo lo que buscamos es un estado de atención sin interpretación dialéctica mantenido de forma continua durante toda la vigilia y no solo cuando estamos viendo televisión o leyendo.